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sábado, 23 de abril de 2011

Entrevista a Isabel Fernández "Nadie piensa que eres un inculto si le das de lado a los números y eso te hace manipulable"

"Nadie piensa que eres un inculto si le das de lado a los números y eso te hace manipulable"
Isabel Fernández, esta joven  matemática, profesora en la escuela de ingeniería informática en Sevilla, ha sido la primera mujer española en hablar en el congreso internacional de matemáticas, el nombre de la ponencia: Superficies de curvatura media constante.

Berta González de Vega
Varias coca cola light después, un mediodía caluroso de Sevilla, una tabla de queso de la Serena y bacalao a la que no hace ascos, por eso de la ácidez, pese a su avanzado estado de gestación, que dirían los cursis, aquí está el resumen de la charla con una joven matemática que se da poca importancia.
Pregunta.- Si yo ahora la viera con unos amigos resolviendo algo en una servilleta, y sintiera envidia sana, ¿estaría justificada?
Respuesta.- Pues sí, porque la verdad es que disfrutamos. La investigación tiene mucho de vocacional, por dinero no lo hacemos. Nos gusta y por eso tenemos esa fama de estar todo el día pensando. Esto tiene parte de hobby, o de videojuego, te picas con el problema, si no te sale, se lo quieres comentar a alguién.
P.- Si más  matemáticos hablaran de lo divertido que es, habría otra percepción de ellas, ¿no?.
R.- Es un idioma. Al principio no entiendes nada pero luego se te abre un mundo que antes no eras capaz de explicar y hace falta dar ese saltito y no es tan difícil entender las matemáticas básicas.
P.- No saber de números no está mal visto, a diferencia de no saber leer, pero, según unos compañeros suyos el otro día en un artículo, la incultura básica  con las cifras nos hace mucho más manipulables e indefensos en el mundo...
R.- Es que de verdad que es como el que no sabe leer. No accedes a una parte de la información, hay ciertas cosas que no tienen sentido sin los números y esa situación sí te hace más manipulable.
P.-¿Siempre le gustaron?
R.- Sí. Y ni siquiera recuerdo si los profesores eran buenos o malos. Lo de los profesores malos tampoco puede ser una excusa para no saber porque tampoco lo es si el de Historía lo es que no te sepas la fecha del Descubrimiento de América. Hay profesores que no ayudan pero las ganas de aprender deberían de estar por encima. Siempre parece que las  lagunas en matemáticas están más justificadas que las de cultura general y no pasa nada si se les da de lado alegremente a los números, nadie piensa que eres un inculto.
P.-¿Sabe realmente la gente las salidas de las matemáticas?
R.-Dicen que no hay paro entre los matemáticos. Cuando yo estudié la gran mayoría se fue a la docencia y éramos los menos los que elegimos investigación y estadística. Hace  poco he estado en Granada, donde estudié, para darle unas charlas a los que están matriculados en matemáticas en las que les hablaba de las salidas de la investigación  y procuraba contarles anécdotas graciosas. Pretenden que se den cuenta ahora que la docencia no es la única salida.
P.-¿Puede pasar que a algunas de las niñas que no se les dé muy bien enseguida tengan el mensaje de que los números no es lo nuestro? Dicho de otra forma, ¿estaba justificado que Larry Summers cuando fue presidente de Harvard dijera que a las mujeres se nos dan peor los números y que casi tuviera que dimitir?
R.- Soy incapaz de generalizar de esa manera, ahí me sale la vena matemática. Que ahora haya más hombres en las publicaciones   no quiere decir que no se nos den bien, sólo que hemos empezado más tarde. En mi curso ya éramos  mayoría de mujeres y en la especialidad de investigación , también. Ahora ya hay más becarias que becarios, lo que significa que habrá luego más catedráticas. Y hemos llegado a eso sin cuotas. Me parece anecdótico que haya carreras con más o menos mujeres. Es verdad que ahora mismo puedes contar con los dedos de una mano las catedráticas de Geometría que hay en España pero estoy segura de que las cosas habrán cambiado mucho en 30 años, habrá muchas más.
P.-Ahora estoy embarazada y eso supondrá cierto parón...
R.-Tengo claro que lo que me queda de año mi prioridad va ser la niña. Si tengo que trabajar, lo haré porque hago otras cosas además de investigar, pero sé que no voy a tener el tiempo ni la tranquilidad que he tenido hasta ahora para pensar. No lo voy a poder hacer porque han cambiado mis prioridades. Pero las mías y las de otros, porque Pablo Mira, un compañero de la Universidad internacional de matemáticas, también acaba de ser padre y tenemos más cosas pendientes que antes. Esto es una decisión mía y también es verdad que conozco a gente  que lo ha sabido compaginar. Es  que hasta ahora no tenía ninguna obligación. Si quería quedarme investigando todo un domingo, lo hacía  y no tenía horario para volver a casa. Esto no funciona que te levantas una mañana y dices: "Hoy voy a hacer un teorema buenísimo". Necesitas mucho tiempo y sé que, a partir de ahora, a lo mejor estoy pensando que no llego a recoger a la niña a las doce.
P.-Ninguna universidad española se puede permitir el lujo de tener a gente como usted sólo pensando, como hacen en Princeton, por ejemplo, con Andrew Wyles, que resolvió  el teorema de Fermat después de varios años dedicado solo a eso...
R.- En España, hay muy poca gente dedicada solo a investigar matemáticas, algunos de ellos en el CSIC solo. Pero que conste que tampoco me importa dar clases, me baja a la tierra, de paso, que hay matemáticas que dominas fácilmente, aunque luego en el despacho casi te estés dando cabezazos con las paredes.
P.- ¿Ha bajado mucho el nivel con el que llegan los estudiantes?
R.-Llevo poco tiempo dando clase pero sí recuerdo que, al empezar la carrera, yo dominaba más cosas, que deberían ser básicas para entrar en ciencias puras o en una ingeniería . En ese sentido tenemos que hacer algo  para no perderlos el primer día, por eso en muchos sitios están haciendo cursos cero de matemáticas. Ya hay sitios en internet que lo hacen, apoyados por los profesores de universidad que estamos viendo el problema.
P.- ¿Por qué escasean las vocaciones de matemáticas?
R.-Quizás por lo que hemos dicho antes, porque no estamos explicando bien las salidas y se van a las ingenierías. Ahora sí que les deberíamos decir que detrás del método de búsqueda de google hay un algoritmo, que son matrices y valores propios. Hay que empezar a enseñar mejor para qué sirven las matemáticas. Además, se ha perdido esa visión de la universidad como un sitio en el que seguir formándose. En mi caso, no me preocupé  de qué hacer en el futuro, me gustaban las matemáticas y quería seguir aprendiendo.
P.-¿Cómo fue la experiencia de hablar en Hyderabad, donde se celebró el congreso internacional de matemáticas?.
R.-Me pareció una reunión inmensa. Yo estoy acostumbrada a otras más específicas, donde nos juntamos mucho 200, pero es que allí se reúnen 4000 matemáticos de todas las ramas. Fue una experiencia que me gustó muchisimo. Además, nos salió la presentación justo como queríamos y nos felicitaron.
P.-¿Nunca ha tenido la tentación de marcharse fuera?
R.-Para quedarme, no. He ido varias veces, en estancias de tres meses, a Río de Janeiro, donde existe un instituto muy bueno  en Geometría. Siempre he tenido claro quería vivir en España y, en mi campo, no hace falta salir para investigar con calidad. Ahora mismo, te vale con estar muy bien comunicada y en matemáticas no hace falta dominar muchos idiomas porque los números son universales. Además, en matemáticas se hace investigación muy bien colaborando con muchos extranjeros. Apenas hace falta hablar porque nos comunicamos con los números, por eso es el idioma universal. Es muy sencillo colaborar. También es cierto que no se necesitan grandes laboratorios, que nosotros con un ordenador y un folio nos arreglamos. Sí hay cosas que sólo pasan en España y dificultan un poco la investigación, como división estricta de los departamentos. Nos encanta compartimentarlo todo y, en el extranjero, se trabaja mucho más juntos. Lo de España hace más difícil el poder intercambiar información. Pero mi experiencia ha sido muy buena. Yo sí he podido estudiar en una de esas islas que hay en la universidad de Granada, tiene un nivel muy bueno. Creo que he heredado su visión investigadora, es una gente que se ayuda, como nos ha enseñado Francisco López, mi director de tesis. La investigación la haces porque quieres, nunca he tenido la sensación de estar rodeada de gente que se pisa unos a otros. En realidad, somos como niños jugando, el ambiente es muy bueno y son mis amigos.
P.- Se lo pasa tan bien, volviendo al principio, que puede ocurrir que  aparezca un Perelman de la vida y rechace la medalla Fields porque dice que con el placer de resolver problemas le basta...
R.- Bueno, no era solo una medalla, era también un millón de dólares. Yo me lo paso bien, pero le aseguro que yo lo cojo. Perelman es el estereotipo de matemático llevado al extremo.
P.- De extravagante, se refiere. Como su investigación sobre la superficie de las pompas de jabón...
R.- Bueno, eso es lo que cuento, para que la gente lo entienda pero en realidad son superficies más sofisticadas. Las pompas son el ejemplo más visual, pero la investigación tiene un nombre más feo. Ahora he vuelto a colaborar con compañeros de Granada en asuntos parecidos.
P.- Desgraciadamente, no es normal lo suyo, estudiar en Granada y enseñar en Sevilla...
R.- Yo tuve una beca para hacer la tesis pero mi director fue totalmente sincero conmigo y me dijo que, a acabar, en Granada, no habría sitio. Mandé el curriculum a todas las plazas que salieron y conseguí en matemática aplicada en la Escuela de Ingeniería. Nunca he estado en paro. Es verdad que compañeros míos de Granada incluso han salido de España. Trabajo hay, otra cosa es  que lo haya justo donde tú quieres. Pero volverán. Por supuesto que es muy prematuro, pero sí que me gustaría que mis hijos estudiaran fuera de casa. Aunque siga aquí y haya matemáticas, me gustaría que se fueran a Granada, por ejemplo. Creo que es una experiencia muy buena.
P.- Aunque Granada dé un poco de miedo a los padres, demasiados planes alternativos al estudio o eso decían muchos de los de mi generación...
P.- Por eso mis padres me tuvieron los dos primeros años de carrera en una residencia de monjas donde tenía que llegar a las once de la noche como muy tarde entresemana.
P.-Su padre es uno de los organizadores del torneo de ajedrez de Linares...¿no le ha dado por practicarlo?
R.- No tengo paciencia. Nos enseño desde pequeño, pero soy incapaz de estar sentada intentando ver las consecuencias de una jugada , para eso, me pongo a trabajar. Mi paciencia las gasto en las matemáticas. Si juego es para evadirme.
P.- Los Ramón y Cajal -postdoctorados españoles en el extranero que deciden volver- a veces no son muy bienvenidos en los sitios...
R.- Pues de lo mejor que ha hecho el Ministerio, dar la posibilidad a gente muy buena que está  en el extranjero para poder volver. De hecho, cualquier departamento debería darse de tortas para conseguir traerse alguno.

Cuestionario mínimo

LIBROS
Me gusta mucho Paul: Soy un poco de arrebatos, como me dé por un autor, me leo casi todo lo que tiene publicado, por eso se me confunden títulos. Me pasa igual con Murakami. Ahora estoy con Pantaleón y las visitadoras, de Vargas Llosa. Y me han recomendado un libro sobre la crianza de los niños que aboga por el colecho, en vez de dejarles llorar hasta que se duerman.

MÚSICA
He intentado que en  el embarazo me gustara la clásica, pero al final vuelvo a lo que llamán canciones "cortavenas" , muy tranquilitas, de Depedro o Russian Red.

CINE
La última que he visto ha sido "El Cisne negro" pero de las que más me han gustado este año ha sido "El discurso del rey", es una película redonda.

ÉPOCA DE SU VIDA
La carrera me lo pasé muy bien, esa sensación de no estar aún enfrentándote al mundo y recuerdo que. mientras vivía, ya era consciente de que era así.

RINCÓN DEL MUNDO
Río de Janeiro, vivía en Ipanema. Era la primera vez que me iba tres meses fuera y me gustó comprobar que era capaz de desenvolverme.

Fuente Periódico El Mundo Domingo 17 de Ábril de 2011

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